A. CORBILLÓN/VALLADOLID
Los casos de violencia escolar ponen sobre la mesa de la comunidad educativa la necesidad de dotar a los colegios de más medios humanos y técnicos para responder a las nuevas realidades sociales y de conducta. Profesores, padres, educadores sociales, la Junta e incluso los alumnos reconocen que la escuela solo es un reflejo de la realidad. Y todos coinciden en reclamar más instrumentos, pero, sobre todo, en abrir las aulas a la sociedad y viceversa para que todos asuman el papel ‘nuclear’de la educación.