SALUDA

En tus manos nuestra memoria anual: es un texto elaborado a muchas manos a lo largo de 12 meses. En sus páginas va el compromiso concreto de hombres y mujeres por mejorar el mundo desde su aportación en lo pequeño.

Caritas mira la realidad de vulnerabilidad y precariedad y descubre que la crisis no se ha ido para muchas personas y familias de nuestra Diócesis generando lo que los estudios describen como sociedad insegura, es decir, personas en la antesala de la exclusión.

Esta memoria social contiene historias de superación, de segundas oportunidades, de pequeños milagros y también de sonrisas que vuelven a la cara. Conmueve el relato de quienes llegaron a nuestra tierra huyendo de la suya; las palabras de mujeres saliendo del miedo; la soledad de los mayores; el primer empleo conseguido por el joven que hizo uno de nuestros cursos formativos; los juegos de los niños y niñas; la vida rota por adicciones de personas que también son vecinas de nuestros barrios; el deporte... Son números con rostro.

La Comunidad Cristiana alienta esta labor que ahora resumimos y que realizan personas voluntarias y trabajadoras que ponen lo mejor de sus capacidades al servicio de los más vulnerables, situando a la persona en el centro y trabajando desde sus posibilidades y no solo desde las carencias. Creemos en el acompañamiento integral, que pone el acento en el proceso y no tanto en el resultado final. Es así como desarrollamos nuestra misión: denunciar la injusticia y la desigualdad y promover un modelo de sociedad más justa y solidaria.

Igual que aquellos que vieron en la escena del Evangelio al niño poner sus 5 panes y 2 peces y se asombraron al descubrir que aquel poquito sació a la gran multitud, también nosotros hoy estamos llamados a dejarnos tocar por la realidad y a poner al servicio de la comunidad nuestros recursos materiales y personales. Solo de esta manera, esta memoria que ahora presentamos será un paso más en ese salir al encuentro de las personas dejando que su realidad entre en nosotros, nos transforme y genere fraternidad.