Archivo por días: 15 junio, 2021

Mayores cuidan de mayores

La preocupación de Cáritas Diocesana por el buen trato, se concreta, entre otras acciones, en afrontar la soledad y el aislamiento social de las personas mayores, tarea en la que el voluntariado, y en particular las personas mayores voluntarias, juegan un papel insustituible.

Por ello, las personas que forman parte de las Cáritas Parroquiales en el Arciprestazgo Oeste han querido realizar un gesto de reconocimiento a todos los voluntarios mayores que acompañan a personas mayores dentro del Programa «Envejecemos en común». Ellos, a pesar de todas las dificultades aparecidas con la pandemia, han seguido mostrando a los mayores el amor de un Padre que no abandona, a través de las llamadas continuas y alguna que otra visita.

El gesto ha tenido lugar el jueves 10 de junio al final de la Eucaristía de las 20.00 horas celebrada en la parroquia de San Vicente de Paúl, con la que concluyó el encuentro de fin de curso en el que han participado las personas voluntarias de las Cáritas Parroquiales y de las diferentes acciones sociales en el territorio del Arciprestazgo Oeste.

Estas son las palabras que una persona, en nombre de todos los agentes de Cáritas del Arciprestazgo, las dirigió:

Faela, Amalia, Ana, Eugenio, Vicente, Federico, Rosa, Luis, Natalio, Luisa y Juana, voluntarias y voluntarios del programa de mayores de Cáritas en el Arciprestazgo Oeste. Las personas mayores han sufrido mucho durante este tiempo de pandemia: muertes, enfermedad grave, deterioro por el aislamiento… Y vosotros, en nombre de Cáritas, en nombre de todas nuestras comunidades parroquiales, como personas de fe, habéis continuado acompañando a otras personas mayores que padecen una soledad sentida.

Por ello hoy queremos tener un gesto de agradecimiento hacia vosotros, y en vosotros, a todas las personas de Cáritas que han seguido mostrando el rostro samaritano de la Iglesia en nuestras parroquias durante este tiempo de pandemia.

¡GRACIAS! en mayúsculas, de parte de todos los que formamos esta comunidad arciprestal.

A continuación se les entregó un ejemplar de la Carta Apostólica «Con corazón de Padre» del Papa Francisco. Porque, ¡qué mejor referencia para estas personas voluntarias que San José!, ¡quién mejor guía para el buen trato que él!.

15 de junio: Día Mundial de toma de conciencia del abuso y maltrato en la vejez

El 15 de junio se conmemora el Día Mundial de la Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato en la Vejez, instituido por la Organización de las Naciones Unidas en el año 2011, con el objetivo de sensibilizar sobre la importancia de los derechos de las personas mayores, para que estas puedan disfrutar de una vida sin abusos, violencia y abandono.

Cuando hablamos de personas mayores no podemos obviar que estamos viviendo, en los países desarrollados y en vías de desarrollo, un importante incremento de la población de 65 o más años (en España se calcula que en el año 2050 esta población será del 33,2 % y de ≥ 80 del 11,4 % que representarían el 44 % de los mayores de 65 años) y que esto conllevará muchos aspectos a abordar, incluido el de los malos tratos.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el maltrato en la vejez se define como “un acto único o repetido que causa daño o sufrimiento a una persona de edad, o la falta de medidas apropiadas para evitarlo, que se produce en una relación basada en la confianza”. Apunta también la OMS que puede adoptar diversas formas, como el maltrato físico, psíquico, emocional o sexual, y el abuso de confianza en cuestiones económicas, y que también puede ser el resultado de la negligencia, sea esta intencional o no.

El abuso y el maltrato de cualquiera de estos tipos ha sido y es un tema tabú, aunque, poco a poco, comienza a visibilizarse. Antes, se ocultaban y se consideraban como un tema estrictamente privado y en la actualidad se van visibilizando, considerándose un problema de salud pública y social, ante el que debemos intervenir y denunciar cualquier actitud de vulneración de sus derechos y menosprecio a su dignidad.

Según un informe de la Organización Mundial de la Salud publicado en el año 2018, una de cada seis personas mayores sufren malos tratos en el mundo y el 33% de las personas mayores institucionalizadas es víctima de abusos.

En España, no existen demasiados estudios, ni de incidencia, ni de prevalencia, lo que no nos permite hacer una idea real del problema, por lo que la mayoría de los casos de maltrato y abusos siguen permaneciendo ocultos. Sin embargo, la  Unión Democrática de Pensionistas y Jubilados (UDP) ha lanzado un nuevo indicador social por el que pretende acercar y dar a conocer este problema. Las cifras indican que entorno al 7 % de personas mayores viven situaciones de maltrato y una de cada seis han sufrido algún tipo de abuso, aunque esto puede ser solo la punta del iceberg.

Además, a todo esto habría añadir que durante la crisis sanitaria y social provocada por la pandemia del COVID-19, a las situaciones de temor, aislamiento y soledad,.. se ha unido su impacto en la salud, ya que las personas mayores han sido estigmatizadas por su edad, con limitaciones en la atención médica y en el acceso a los recursos sanitarios.

¿Cómo podemos prevenir el abuso y el maltrato contra las personas mayores?

Evidentemente, como sociedad tenemos la obligación moral de modificar la imagen negativa que tenemos de la vejez, acabando con los mitos, estereotipos y edadismos, con la creencia de que las personas mayores son una carga económica, social,… y promover, a través de la sensibilización y la formación, de los recursos para prevenir, identificar y denunciar  este tipo de situaciones.

En Cáritas Diocesana de Valladolid, concretamente, desde el Programa “Envejecemos en común”, seguimos promoviendo las actitudes positivas hacia las personas mayores, la humanización, el reconocimiento de su dignidad y sus derechos,  la atención centrada en la persona,  el desarrollo integral y el fomento de la toma de decisiones, acercándonos así al principal objetivo, el buen trato.

Y es que, como dijo el Papa Francisco: “Una sociedad que no respeta a sus mayores, es una sociedad que no tiene futuro”.